Incorpore suavemente las claras de huevo a la mezcla de queso crema, teniendo cuidado de no desinflar la mezcla.
Hornada:
Vierta la masa en el molde preparado y alise la superficie con una espátula. Coloque el molde para pastel dentro de un molde para hornear más grande y llene el molde exterior con agua caliente (aproximadamente hasta la mitad de los lados del molde para pastel).
Hornee durante 1 hora y 10 minutos, o hasta que esté listo pero todavía ligeramente tambaleante en el centro.
Enfriamiento:
Apaga el horno, abre un poco la puerta y deja que la tarta de queso se enfríe en su interior durante 1 hora. Esto ayuda a evitar que se agriete.
Servicio:
Enfríe la tarta de queso en el refrigerador durante al menos 4 horas antes de servir. Espolvoree con azúcar en polvo, si lo desea, antes de servir.
Conclusión: Esta receta de tarta de queso japonesa aporta un sabor internacional muy apreciado a tu cocina, ya que ofrece una textura suave y cremosa con la cantidad justa de dulzura. Es un postre sofisticado pero sorprendentemente sencillo que seguro impresionará en cualquier reunión o le dará un final delicioso a cualquier comida. ¡Disfruta de la exquisitez que se derrite en la boca de uno de los postres más famosos de Japón!
