3. El suelo: la base del crecimiento
El romero prefiere un suelo ligero, arenoso y con buen drenaje. Un suelo demasiado pesado o arcilloso puede retener demasiada agua y ahogar las raíces. Aquí te explicamos cómo preparar el suelo ideal para tu romero:
Mezcla de sustrato: Si cultivas romero en macetas, utiliza una mezcla de tierra para cactus o suculentas, que está diseñada para un drenaje óptimo. También puedes preparar tu propia mezcla combinando tierra de jardín, arena y perlita.
pH del suelo: El romero prefiere un suelo ligeramente alcalino, con un pH entre 6.0 y 7.5. Si tu suelo es demasiado ácido, puedes añadir un poco de cal para ajustar el pH.
4. La poda: mantener la forma y la salud
La poda es esencial para mantener tu romero en buen estado. No solo ayuda a controlar su crecimiento, sino que también promueve la producción de hojas nuevas y previene enfermedades.
Cuándo podar
La mejor época para podar el romero es después de la floración, generalmente a finales de la primavera o principios del verano. Esto permite que la planta se recupere y crezca vigorosamente durante la temporada de crecimiento.
Cómo podar
Eliminar hojas secas o amarillentas: Usa tijeras de podar limpias y afiladas para cortar las ramas secas o dañadas.
Dar forma a la planta: Poda las ramas más largas para mantener una forma compacta y estimular el crecimiento de nuevos brotes.
Prevenir plagas: Si notas signos de infestación, como pulgones o cochinillas, poda las áreas afectadas y trata la planta con un insecticida natural, como una mezcla de agua y jabón neutro.
5. Fertilización: nutrientes para un crecimiento óptimo
Aunque el romero no es una planta exigente en cuanto a nutrientes, una fertilización moderada puede ayudarla a crecer más fuerte y saludable.
Fertilizante orgánico: Utiliza un fertilizante orgánico, como compost o humus de lombriz, una o dos veces al año. Aplícalo en primavera y otoño para proporcionar los nutrientes necesarios.
Evitar el exceso de fertilizante: Demasiado fertilizante puede dañar las raíces y reducir la producción de aceites esenciales, que son los responsables del aroma y sabor del romero.
6. Multiplicación: cómo propagar tu romero
Si deseas tener más plantas de romero, puedes propagarlas fácilmente mediante esquejes. Aquí te explicamos cómo hacerlo:
Selecciona una rama sana: Elige una rama joven y flexible de aproximadamente 10-15 cm de largo.
Retira las hojas inferiores: Quita las hojas de la parte inferior del esqueje para exponer el tallo.
Planta el esqueje: Coloca el esqueje en una maceta con sustrato húmedo y colócala en un lugar cálido y luminoso, pero sin sol directo.
Riega con moderación: Mantén el sustrato ligeramente húmedo hasta que el esqueje desarrolle raíces, lo que suele tardar entre 4 y 6 semanas