Ralla las papas:
Ralla 3 papas y reserva.
Mezcla los ingredientes:
Combina los ingredientes húmedos:
En un recipiente aparte, bate 3 huevos, 50 ml (1/4 de taza) de leche y 2 cucharadas de aceite vegetal.
Agrega el calabacín, las papas y el queso:
Agrega el calabacín rallado, las papas, las cebolletas picadas y 70 g de queso rallado a la mezcla de huevos. Revuelve bien para combinar.
Agrega los ingredientes secos:
Agrega 3 cucharadas de sémola, 70 g de harina y 1 cucharada de polvo para hornear hasta que todo esté bien combinado.
Hornea la cazuela:
Prepara la fuente para hornear:
Engrasa una fuente para hornear o cúbrela con papel pergamino.
Hornear:
Vierte la mezcla en la fuente para horno y alisa la superficie. Hornea en un horno precalentado a 200 °C (392 °F) durante 30 minutos o hasta que esté dorada y bien cocida.
Servir:
Una vez horneada, deja que la cazuela se enfríe un poco antes de cortarla y servirla. ¡Disfrútala caliente con tus guarniciones favoritas!
Sugerencias para servir:
Sírvela como plato principal con una ensalada o como acompañamiento de carnes o pescados a la parrilla.
Adorna con cebollino picado adicional o una cucharada de crema agria para darle más sabor.
Consejos de cocina:
Asegúrate de exprimir la mayor cantidad de agua posible del calabacín para evitar que la cazuela quede aguada.
Puedes sustituir la sémola por pan rallado si lo prefieres.
Beneficios nutricionales:
El calabacín es una verdura baja en calorías y rica en vitaminas A y C.
Las papas aportan carbohidratos y potasio, lo que ofrece energía y nutrientes.
Los huevos y el queso aportan proteínas y grasas saludables al plato.
Información nutricional:
Vegetariana: Esta receta es apta para vegetarianos.
Información nutricional (por porción):
Calorías: 220
Proteínas: 8 g
Carbohidratos: 24 g
Grasas: 10 g
Conservación:
Frigorífico: Guarda las sobras en un recipiente hermético en el frigorífico durante un máximo de 3 días.
Congelador: Congela las porciones durante un máximo de 1 mes. Vuelve a calentar en el horno antes de servir.
Por qué te encantará esta receta:
Fácil de preparar: Los ingredientes sencillos y la preparación mínima hacen de este un plato práctico.
Saludable y abundante: Repleto de verduras, proteínas y fibra, es una opción nutritiva.
Versátil: Se puede servir como plato principal o guarnición, perfecto para cualquier comida.Mejores restaurantes cerca de mí