Preparación:
Vierte el aceite de bebé en un recipiente de vidrio con tapa hermética.
Agrega los clavos de olor enteros y mezcla bien.
Deja reposar la mezcla durante 24 a 48 horas en un lugar oscuro para que los compuestos del clavo se integren en el aceite.
Agita bien antes de usar.
Usos recomendados:
Como repelente: Aplica una pequeña cantidad en la piel expuesta antes de salir.
Para masajes: Usa unas gotas y masajea zonas con tensión muscular o dolor articular.
Para aliviar picaduras: Coloca un poco sobre la picadura para calmar la comezón y la inflamación.
Para hidratar la piel: Aplícalo después del baño para suavizar la piel y mantenerla hidratada.
Precauciones:
Realiza una prueba en una pequeña zona de la piel para evitar reacciones alérgicas.
No aplicar en heridas abiertas ni en piel irritada.
Evitar el contacto con los ojos y mucosas.
No usar en bebés menores de 6 meses sin consultar con un especialista.
Este remedio casero es una forma natural y sencilla de aprovechar los beneficios del clavo de olor en el cuidado personal.