HELADO DE CREMA CON CHOCOLATE

2. En un bol aparte, bate las yemas de huevo con un batidor de mano o eléctrico hasta que queden suaves y de color amarillo pálido.
3. Añade poco a poco la leche caliente a las yemas mientras sigues batiendo. Esto es importante para evitar que las yemas se cocinen de golpe (proceso de “temperado”). Hazlo lentamente hasta que hayas incorporado toda la leche.
4. Vuelve a colocar la mezcla en la cacerola y cocina a fuego lento, revolviendo constantemente, hasta que espese lo suficiente como para cubrir el dorso de una cuchara. Esto será como una crema inglesa (natillas). No dejes que hierva para evitar que se corte.
5. Una vez que la mezcla esté espesa, retírala del fuego y agrega la crema para batir y la vainilla. Remueve bien para combinar.
6. Coloca la mezcla en un bol y deja enfriar a temperatura ambiente. Después, cúbrela y refrigera durante al menos 4 horas, o mejor aún, durante toda la noche para que los sabores se mezclen bien.

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