1. Observá la base de la piña
La parte inferior de la piña, donde estaba la tija, es el punto donde la fruta comienza a madurar. Para asegurarte de que está en su punto justo:
Sentí su aroma: Acercá la nariz a la base y oléla. Si desprende un perfume dulce y tropical, es señal de que la piña está madura y sabrosa.
Cuidado con los olores fuertes: Si no tiene aroma, aún no está madura. Si el olor es muy fuerte o tiene un toque fermentado, significa que ya pasó su punto óptimo y puede estar demasiado madura.
2. Prestá atención al color de la cáscara
La tonalidad de la piña es un gran indicador de su maduración:
Debe tener un color dorado uniforme, lo que indica que el azúcar está bien distribuido en toda la fruta.
Si todavía tiene muchas partes verdes, es probable que le falte madurar.
Evitar piñas con manchas oscuras o demasiado marrones, ya que podrían estar pasadas.
3. Hacé la prueba de la hoja
Este es un truco infalible:
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