4-5 papas medianas, hervidas y cortadas en rodajas
1/2 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de pimienta negra
Para la salsa de queso:
1 taza de leche o crema espesa
1 cucharada de mantequilla
1 cucharada de harina
1/2 cucharadita de ajo en polvo
1/2 cucharadita de pimienta negra
1/2 cucharadita de albahaca seca (opcional)
1/2 taza de queso rallado (cheddar, mozzarella o una mezcla)
Para la cobertura:
6-8 rebanadas de queso (cheddar, mozzarella o suizo)
1/2 taza de queso rallado (para un toque extra de gratinado)
1 cucharada de perejil fresco picado (para decorar)
Instrucciones
Paso 1: Preparar la carne molida
Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio.
Sofríe la cebolla hasta que esté tierna.
Agrega la carne molida y cocina hasta que se dore, separándola con una espátula.
Incorpora los pimientos, el ajo, la sal, la pimienta, el pimentón, el orégano y el comino.
Agrega la salsa de tomate y mezcla bien. Cocina a fuego lento durante 5 minutos y retira del fuego.
Paso 2: Preparar la salsa de queso
En una cacerola pequeña, derrite la mantequilla a fuego bajo.
Incorpora la harina y cocina por 1 minuto, batiendo constantemente.
Agrega la leche poco a poco, sin dejar de batir, hasta obtener una mezcla homogénea.
Incorpora el ajo en polvo, la pimienta y la albahaca seca.
Cocina hasta que la salsa espese y luego agrega el queso rallado. Remueve hasta que se derrita por completo.
Paso 3: Armar la cazuela
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Engrasa una fuente para hornear y distribuye la carne molida de manera uniforme.
Coloca las rodajas de papa sobre la carne y sazona con sal y pimienta.
Cubre con las rebanadas de queso y vierte la salsa de queso de manera uniforme.
Espolvorea queso rallado para un gratinado irresistible.
Paso 4: Hornear
Lleva la cazuela al horno y hornea por 25-30 minutos, hasta que el queso esté dorado y burbujeante.
Retira del horno y deja reposar por 5 minutos antes de servir.
Paso 5: Servir y disfrutar
Decora con perejil fresco.
Acompaña con una ensalada o pan de ajo.
¡Disfruta cada bocado de esta delicia cremosa y con queso!
Conclusión
Si buscas una receta fácil, deliciosa y reconfortante, esta cazuela de carne molida y papas con queso es la elección perfecta. Su combinación de sabores y texturas hace que sea un plato inolvidable para compartir en familia o con amigos.
Ya sea para una cena entre semana, una reunión especial o para preparar con anticipación, esta receta siempre será un éxito. ¡Anímate a probarla y disfruta de su exquisita cremosidad y su toque de queso fundido!
¡Buen provecho!